La mezquita y la escuela tienen un papel educativo muy eficaz si cooperan y no se contradicen en sus métodos con los niños.

La mezquita y la escuela tienen un papel educativo muy eficaz si cooperan y no se contradicen en sus métodos con los niños.

Algunos de los medios que ayudan a la mezquita para cumplir su misión:

1.- El niño debe sentir y ver el amor del padre/educador y las glorificaciones para las mezquitas ([1]). Si los miembros de la familia oyen el azan (llamado a la oración) deben escuchar y repetir con el mu'adhin y pedirle al niño que repita lo que el mu'adhin (el que recita la llamada a la oración) dice. Esta repetida llamada a la oración definitivamente atraerá la atención del niño, quien así se apegará a la oración, pues verá a los miembros de la familia iniciar la oración directamente luego de escuchar el azan. Por lo tanto, la azan será una alarma psicológica en la conciencia del niño que lo motivará a orar. Sería muy favorable que la madre dirija la atención del niño a la imagen de la mezquita mostrándole fotos de mezquitas y dibujando mezquitas con él. Ella debe decirle que cuando él crezca, él irá a la mezquita para orar. El padre debería mencionar al niño el estatus y virtudes de las mezquitas y la recompensa para el musallin (los musulmanes que realizan las oraciones en la mezquita). El padre debe alabar a las personas que realizan sus oraciones en congregación, sean estos, personas de la familia, vecinos o parientes ([2]).

2.- El niño puede ir con su padre a la mezquita, si lo desea, pero debe ser, a continuación, a la edad de saber la etiqueta del baño ([3]). Si él causa cualquier disturbio en la mezquita, gritando o corriendo, no deberíamos prohibirle ir a la mezquita, sino más bien aconsejarlo y disciplinarlo.

3.- Debemos ordenarle al niño que rece, cuando él sea consciente y racional. El padre/educador debe animarlo para realizar las oraciones en congregación. Él debe enseñarle acerca de los requisitos y condiciones de las oraciones, como tahara (limpieza y purificación), cubrir el awrah ([4]), tranquilidad y estabilidad, además de otros requisitos previos para una oración válida ([5]).

4.- El niño debe ser tratado con suavidad y positivamente por su familia, el imam de la mezquita, el mu'azin y los musallin. Si ven que hace cualquier movimiento de menosprecio, deben bajar sus miradas y disciplinarle de una manera tolerante e indulgente. Deben ser amables con él, sonreírle ([6]), alabarle, preguntar sobre él cuando no viene, saludarle y darle regalos. Si él llega temprano, él no debería ser enviado a las filas de atrás, aun cuando estuvo sentado en la primera fila. Hay algunos méritos por mantener a los niños con las personas mayores en las filas frontales: si los niños son todos enviados atrás, se reunirán para jugar y eso podría perturbar al resto, por los gritos y el correr, pero si se quedan con los mayores estarán más tranquilos y actuaran maduramente ([7]). Además, el niño aprende la manera adecuada de realizar oraciones y las nawafil (oraciones opcionales) observando a los adultos a su alrededor. También él se sentirá honrado, orgulloso y respetado porque él está con los adultos.

5.- El niño debe estar inscrito en los círculos de enseñanza y para el aprendizaje y memorización del Corán en la mezquita para que crezca apegado a la mezquita y a la gente del barrio. También ganará buenos amigos que compartirán su objetivo de aprender el Corán. También se mantendrá ocupado aprendiendo algo esencial para su vida, como es: memorizar el Corán, especialmente durante la tarde que es un momento que por lo general se desperdicia jugando con los niños de la calle y viendo televisión.

6.- El padre debe llevar al niño a asistir a clases y conferencias celebradas en la mezquita.

7.- El papel de la escuela en la educación: La escuela tiene un papel esencial, que es mayor hoy en día que el papel de la mezquita. Se considera la segunda institución educativa en la formación  del carácter del niño, ya que abraza a los niños durante más tiempo y le da la oportunidad de tener amigos de la misma edad.

La importancia de la escuela se encuentra en tres aspectos:

Estructura social: Todos los niños en las escuelas son iguales y deben recibir el mismo trato. Nadie debe ser distinguido o favorecido sobre sus compañeros excepto por razones de excelencia educativa y moral o ambos ([8]). De esta forma, el niño que se siente como un paria en su casa será bienvenido en la escuela si trata de hacer lo mejor en estudios y actividades de la escuela. Tendrá la oportunidad de sobresalir en la escuela, por lo que él puede ser un personaje agradable a diferencia de cómo él pueda sentirse en su casa. Cuando interactúa con sus compañeros que tienen diferentes personalidades, aprenderá los principios del respeto, cómo tratar a los demás y funcionar en el trabajo en equipo. Además obtendrá disciplina a través del juego y realizando actividades de la escuela como un grupo. A través de estas actividades, algunos niños muestran habilidades de liderazgo y la capacidad de la responsabilidad a una edad temprana. Son las semillas para futuros líderes y tomadores de decisiones. Muchas naciones progresaron gracias a dar a las generaciones jóvenes la oportunidad de expresarse y desarrollar sus prometedoras  habilidades innatas. Así es cómo los líderes surgen de las masas y se convierten en sus dirigentes.

Estructura moral: La escuela desempeña un papel fundamental en la formación de la moral del niño, especialmente si el padre/educador elige una buena escuela con buenos maestros piadosos y supervisores dignos de confianza que siguen las enseñanzas del Islam ([9]) y en la que el niño puede entablar amistad con buenos compañeros.

La orientación moral de la escuela y el hogar deben unirse y enlazarse para el mejor beneficio del niño. Si el padre sabe que la escuela le está enseñando al niño buenos hábitos, él debe apoyar los esfuerzos de la escuela en ese sentido. Pero si fueran malos hábitos, debe llamar a la escuela para discutir el asunto con el supervisor. Él también debe hablar con su hijo, y enseñarle que todos cometemos errores y convencerlo de la negatividad y la maldad que significa el realizar ese mal habito. El padre también debe dar seguimiento a las costumbres y los comportamientos de su hijo en la escuela y mantenerse en contacto con sus profesores para saber hasta qué punto está progresando su hijo.

Preparación profesional: el significado de la misma no es preparar al niño a practicar una determinada ocupación o trabajo que lo beneficie y a la Ummah (nación islámica). El significado se extiende para incluir los preparativos de una mujer a ser esposa justa y madre antes de prepararla para cualquier otro papel y la preparación del hombre para ser miembro justo en la sociedad, un padre responsable y un ciudadano trabajador que tiene un trabajo bueno y útil. Lo que realmente necesitamos es la preparación y educación de las niñas para el matrimonio y los deberes de la maternidad. La mayoría de los países combinan programas de estudios para hombres y mujeres, excepto por algunos pocos que dedican una clase dos veces por semana para enseñar tareas del hogar y arte. Algunos educadores sugieren ampliar este tema educativo que beneficia a las mujeres y minimizar algunos otros temas que las mujeres no necesitarán en vida su vida futura ([10]). También se sugiere agregar programas de estudios y clases que enseñan a las niñas los derechos de los cónyuges, modales, etiquetas, consejos de belleza, administración y amueblamiento de la casa, además de todas las habilidades que las mujeres necesitan para cumplir con sus funciones como esposas justas piadosas y madres buenas y esmeradas.

Para ayudar a la escuela a llevar a cabo su misión de educar a los niños, el padre debe acostumbrar a su hijo a respetar la escuela, a sus profesores y supervisores. Si el padre no lo hace o aconseja a su niño a faltar el respeto sus maestros y maltratarlos, sería un comportamiento anormal procedente de un padre que es probable un infiel o inmoral ([11]).

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([1]) En Tarbiah Al Islamiah por Sulaiman Al Haqeel: página 149.

([2]) Al Masyid Wa Dawroha en Tarbawee por Saleh Al Sadlan: página 76.

([3]) Dawroha de Wa Al Masjid en Tarbawee por Saleh Al Sadlan.

([4]): Awrah partes del cuerpo que no deberían estar expuestas a otras personas, pero no debe ser confundida con el significado inglés que significa «partes privadas », porque las piernas de la mujer, por ejemplo, son awrah.

([5]) Manhay Al Salaf Fi Tarbiat Al Awlad cinta por el Jeque Mohammed bin Uthaimin.

([6]) Manhay Al-Tarbiah Al-Nabawiah, por Muhammad Nour Swayed: página 134.

([7]) Manhay Al Salaf Fi Tarbiyat Al Awlad cinta por el Jeque Mohammed bin Uthaimin.

([8]) Tiflan de Kaif Nurabi por Mohammed Ziad Hamdan: página 56.

([9]) Nasehat Al Melouk por Al Maroudi: página 175, citando de Manhay Al-Tarbiah Al-Nabawyah, por Muhammad Nour Swayed: página 255.

([10]) Tarbiat Al-Banat por Jalid Al-Shatnout: página 54 y Kaifa Nurabbi Atfalana por Mahmoud Al-Istanbouly: página 135-138.

([11])Dawr Al Bayet Fi Tarbiyat Al Tifel Al Muslim  por Jalid Al-Shatnout: página 102-103.